Una gota que cayó sobre su rostro fue lo que despertó a Eltharion de su estado de ensimismamiento. llevaba ya un rato viendo la inclemente lluvia que caía sobre el valle, y ahí se encontraba él, a la sombra de un árbol, mirando el agua, y sin embargo sus pensamientos se encontraban aún más allá.
Trataba de hallar el último momento de tranquilidad, no lo encontraba. Su cuerpo mostraba los signos de su reciente derrota en batalla. Su mirada mostraba su constante melancolía producto de su trasegar en medio del valle de una desolada y ahora derrumbada Ulthuan. Recordó a Zeuna, su infaltable amigo de los últimos días, y recordó la última vez que lo vio, inmóvil, rendido en batalla, y ya no fue la lluvia la que se derramó en su rostro, fue tal vez su propia lluvia interna.
Y no fue solo la ausencia de Zeuna, era todo a su alrededor lo que Eltharion sentía. Era el cielo gris, era la lluvia incesante, era Zeuna y era Nanion, era todo. La lluvia interna se convirtió en aguacero y Eltharion decidió que era mejor iniciar a caminar solo para hallar un sitió más tranquilo.
El dolor en su cuerpo lo hacía sentir vivo, sin embargo su grito en el valle retumbo una y otra vez, solo para mostrarle a Malekith que a pesar de todas sus trampas y emboscadas, acá seguía y que acabar con su espíritu requería mucho más que la magia negra mostrada hasta el momento. Solo que ahora tal vez era necesario que dejara de andar errante, que era necesario parar, tomarse un aire y definir una nueva estrategia.
Era tal vez momento de buscar la forma de regresar, no sabía la forma, pero tenía que hacerlo. Ulthuan necesitaba ante todo recuperar su gloria, y especialmente su paz y tranquilidad de otros años. Ahora sabía que eso podía requerir mucho tiempo, pero que era necesario hacerlo para derrotar finalmente el sino maléfico de Malekith.
Eltharion sencillamente recogió sus cosas, y en medio de la lluvia empezó su camino, una vez más, esta vez por el regreso y la batalla final. Ya estaba bueno de solo sentir la derrota, era momento de reagrupar sus fuerzas y su gente, y dar el todo por el todo, era el momento de iniciar el retorno.
Mucha catarsis por ahora, que siga la música.
... Hoy que claro ve las cosas,
que ayer no vio, ni va a exigir
sobre su pena se posa
quiere entender para seguir
Llega la batalla
y contra él estalla
algún dia va a escampar
y como sale de esta
quiere la respuesta
sabe que no es escapar...
Suerte es que les digo
Trataba de hallar el último momento de tranquilidad, no lo encontraba. Su cuerpo mostraba los signos de su reciente derrota en batalla. Su mirada mostraba su constante melancolía producto de su trasegar en medio del valle de una desolada y ahora derrumbada Ulthuan. Recordó a Zeuna, su infaltable amigo de los últimos días, y recordó la última vez que lo vio, inmóvil, rendido en batalla, y ya no fue la lluvia la que se derramó en su rostro, fue tal vez su propia lluvia interna.
Y no fue solo la ausencia de Zeuna, era todo a su alrededor lo que Eltharion sentía. Era el cielo gris, era la lluvia incesante, era Zeuna y era Nanion, era todo. La lluvia interna se convirtió en aguacero y Eltharion decidió que era mejor iniciar a caminar solo para hallar un sitió más tranquilo.
El dolor en su cuerpo lo hacía sentir vivo, sin embargo su grito en el valle retumbo una y otra vez, solo para mostrarle a Malekith que a pesar de todas sus trampas y emboscadas, acá seguía y que acabar con su espíritu requería mucho más que la magia negra mostrada hasta el momento. Solo que ahora tal vez era necesario que dejara de andar errante, que era necesario parar, tomarse un aire y definir una nueva estrategia.
Era tal vez momento de buscar la forma de regresar, no sabía la forma, pero tenía que hacerlo. Ulthuan necesitaba ante todo recuperar su gloria, y especialmente su paz y tranquilidad de otros años. Ahora sabía que eso podía requerir mucho tiempo, pero que era necesario hacerlo para derrotar finalmente el sino maléfico de Malekith.
Eltharion sencillamente recogió sus cosas, y en medio de la lluvia empezó su camino, una vez más, esta vez por el regreso y la batalla final. Ya estaba bueno de solo sentir la derrota, era momento de reagrupar sus fuerzas y su gente, y dar el todo por el todo, era el momento de iniciar el retorno.
Mucha catarsis por ahora, que siga la música.
... Hoy que claro ve las cosas,
que ayer no vio, ni va a exigir
sobre su pena se posa
quiere entender para seguir
Llega la batalla
y contra él estalla
algún dia va a escampar
y como sale de esta
quiere la respuesta
sabe que no es escapar...
Suerte es que les digo
2 comentarios:
Hola ,andaba husmeando blogs ,cosa que hace tanto que no hacia y queria invitarte a dar una vuelta por mi blog, http://ymecomoami.blogspot.mx/
Hola ,andaba husmeando blogs ,cosa que hace tanto que no hacia y queria invitarte a dar una vuelta por mi blog, http://ymecomoami.blogspot.mx/
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